La categoría 17 consiguió una victoria 2 a 0 en un partido bastante parejo pero donde Nacional fue superior.

Los primeros 20' se jugaron lejos de los arcos, Nacional con la clásica posesión de pelota intentaba llegar al arco aurinegro, y conseguiría romper el 0 en el primer remate peligroso del partido. A los 22', tras gran jugada de Renzo Sanchez, Dustin Aguirre definió con arco vacío para poner el 1 a 0.

A los 28' gracias a una muy buena jugada colectiva el Decano casi consigue aumentar el marcador, pero el golero tapó el remate.
En el resto del primer tiempo el Decano dominó y tuvo algunas chances peligrosas que no pudo concretar. En lo defensivo Nacional no pasó problemas, ya que no recibió remates peligrosos en los primeros 45 minutos.

El complemento fue bastante parejo y cortado. A los 2’ el Tricolor volvió a tener una ocasión que no pudo concretar.
Nacional mantenía su idea de juego y Peñarol con pocas ideas intentaba empatar, pero la buena defensa del Decano impedía que consiguiera pisar el área. Sobre el final del encuentro el equipo de Rodrigo Lemos seguía generando situaciones pero no conseguía liquidar el encuentro, hasta que en el epílogo, a los 49', Facundo Barrett sacó un remate cruzado al palo izquierdo del arquero que besó la red y selló la victoria.

Rodrigo Lemos habló con Nacional luego del encuentro: "estoy muy contento por la victoria, más que nada por los gurises que jugaron un partidazo, se animaron a jugar al fútbol. Pudimos plasmar lo que hacemos en los demás partidos, que a veces dicen que en los clásicos no se puede hacer. Tuvimos muchas oportunidades de gol, podría haber sido más amplio el resultado pero nos vamos muy conformes, porque estos partidos hay que ganarlos y además se jugó bien".
Sobre la demora en cerrar el partido el técnico comentó: "siempre queres liquidar los partidos lo antes posible, pero creo que en esta ocasión además de quererlo las oportunidades las tuvimos. En el primer tiempo erramos dos goles claros y en el segundo tiempo nos pasó lo mismo, eso lo que hace es tenerte hasta el último minuto con la incertidumbre de que con cualquier pelota quieta, que era la única manera que tenían de llegar al área nuestra, pudieran empatar. Habría sido una lástima por la diferencia que se vio en la cancha".